Pezzi Martínez, E. (1994), en su artículo Arabismos almerienses: alfira, chambao, merdín, recel, dice al respecto:
Chambao:
No figura en el diccionario de la Real Academia (9), sin embargo es voz popular en las provincias de Almería y Granada; en ellas las localiza Alcalá Venceslada, con dos acepciones, la primera como 'sombra|o', es decir, 'reparo o resguardo de ramas, mimbres, esferas, etc., para hacer sombra', sobre la cual cita el siguiente texto: "Allí tiene el habero un chambao para librarse del sol"; para la segunda acepción dice 'cortijo pequeño', con el texto: " Compróun chambao en seis mil duros y vive muy desahogadito". El uso habitual de esta palabra, según mi propia experiencia, se centra más en la primero acepción de Alcalá Venceslada. Así la recoge también Pardo Berbel, para la comarca de la cuenca del río Almanzora, definiéndola como 'techo de ramas y sostenido por palos', y aportando el texto: "Ponte debaio del chambao".
Es muy probable que la etimología de este vocablo se encuentre en la raíz del verbo árabe ŷama'a, 'reunir, |untar, agrupar, ensamblar, montar, componer', y concretamente en el nombre de intensidad u oficio ŷammā', que significa 'montador' y también, según Dozy, designan unas esteros de mimbres con las cuales se construyen vallados para la pesca sobre la playa de Sfax, justificando su nombre porque estas esteras juntan y retienen los peces; yo creo que es más probable que el motivo de llamarse así sea por el trenzado con que se fabrican y por su ensamblaje; ambas acepciones parece que quedan recogidas en la forma española "chamba", que puede proceder del mismo étimo: para la primera, serviría la recogida por la Real Academia, como propia de Méjico, 'empleo, trabajo', quizá referido al oficio de 'montador o ensamblador', obrero que manufactura; para la segunda, la Real Academia localiza en Colombia y Venezuela el uso como 'zanja o vallado que sirve para limitar los predios', que puede relacionarse con la definición de Alcalá Venceslada de "chambao" como 'cortijo pequeño'.
En todo caso, ŷummā' podría equivaler a las formas ŷummā' y ŷimmā' , 'conglomerado, conjunto, montaje, ensamblaje', con la alternancia vocálica propia de las lenguas vulgares, la misma que se refleja en las formas portuguesas, recogidas por Dozy, chumeas, chímeas o chúmbeas, el cual las considera derivadas de ŷami'a, con el mismo significado, afirmando que son términos marinos que no conoce más que en el portugués, en donde indican unas 'piezas de madera que se clavan al móstil cuando estó hendido’10; la variante chúmbea, mencionada, parece requerir me¡or una derivación a través de una disimilación de -mv- en -mb-.
La evolución fonética sería la normal, puesto que el sonido de alza pasa frecuentemente a /z, sobre todo a partir del siglo XVI; lo mismo ocurre con la disimilación del grupo -/z//n- en -mb-, como puede comprobarse en la forma portuguesa anteriormente citada chúmbea. En todos los casos se comprueba la desaparición total del sonido del ‘ayn ante la vocal final.
En cuanto a la acepción de Alcaló Venceslada como 'corti|o pequeño', podemos asimilarla con la variante owl °o, quizó por fiamm °a, que Pedro de Alcaló traduce por "pu|ar" y qUe Dozy interpreta como lo que en Andalucía se dice "peu|ar" (o "peu|al") y En Castilla "pegu|al",
'pequeña porción de siembra o de ganado’ y ’pequeña porción de terreno que el dueño de uno finca agrícola cede al guarda o al encargado para que la cultive por su cuenta como parte de su remuneración anual’.
(9) Sólo consta una forma "chambado", como argentina, 'cuerno, vaso rústico'.